El Viernes Santo se caracteriza por ser el día grande de la cofradía Marraja la belleza y el orden se ponen de manifiesto en estos desfiles culminados por los tronos genuinamente Cartageneros. Es que nada más recogerse la California Procesión del Silencio, rompen el ambiente los Marrajos con los típicos pasacalles de sus tercios de granaderos y judíos que anuncian a la ciudad la inminente salida de los cortejos marrajos. Más tarde el tercio de Jesús Nazareno precediendo a su titular comienza el desfile desde la Pescadería dirigiéndose a "El Lago", lugar donde se encontrará al alba con La Dolorosa conocida como "La Pequeñica", imagen creada por el imaginero Francisco Salzillo siendo este el momento cumbre, el más emotivo de esta procesión. La noche vuelve a vestirse de morado con la Cofradía de Jesús Nazareno. Desde Santa María de Gracia sale la magna procesión marraja del Santo Entierro.
La pescadería de Santa Lucía acogerá la impresionante salida de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Titular de la Cofradía y trascurrirá por el Paseo Delicias, el Puente de Mompeán, la Avenida Trovero Marín, la Plaza de Bastarreche, San Diego y la Plaza de la Merced. Desde la Universidad Politécnica de Cartagena saldrá el Cristo de Medinaceli que trascurrirá por la Muralla de Carlos III y San Diego, incorporándose a la altura de la Calle de La Gloria a la primera procesión. La tercera procesión, la mujer Verónica, compuesta por la Agrupación de Granaderos, Santo Cáliz, Condena de Jesús, Paso de la Caída y Mujer Verónica, desde la Iglesia de Santa María de Gracia y trascurrirá por San Miguel, Campos, Plaza de San Francisco, Arco de la Caridad, Caridad, Beatas, Saura, Gloria, San Diego y Plaza de la Merced. La cuarta y última procesión, la de la Santísima Virgen Dolorosa, compuesta por las Agrupaciones de San Juan y Santísima Virgen Dolorosa, sale por ultimo desde Santa María de Gracia y transcurre por calle del Aire, San Miguel, Campos, Plaza de San Francisco, Arco de la Caridad, Caridad, Don Roque y Plaza de la Merced. El Encuentro se produce en la Plaza de la Merced. Tras él las cuatro procesiones marchan unidas hasta la Iglesia de Santa María.
Por la noche cierra este día tan importante la Procesión del Santo Entierro a solemnidad preside la gran procesión marraja. Los cofrades, uno tras otro, mostrarán los últimos momentos de la Pasión, a través de imágenes de serena belleza, en su mayor parte obra del escultor Capuz. Cientos de capirotes ataviados con los colores alusivos a su advocación correspondiente, pasan escoltando con la luz de los hachotes los distintos tronos, en un cortejo en el que los marrajos echan el resto. El orden riguroso, el ritmo solemne en los tercios de penitentes y esbeltez de los tronos, encumbran las imágenes hasta la misma altura de los miradores, asomando, al torcer las esquinas, como verdaderas apariciones divinas entre el público que abarrota las calles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario